Ver un musical es una excelente manera de entretener y educar a los niños a través de la música.
Después de ver una película, puedes extender la experiencia con actividades que refuercen lo que los niños han visto y oído, fomentando su creatividad, sus habilidades musicales y su capacidad para reflexionar sobre valores importantes. Aquí te comparto una guía paso a paso para convertir una tarde de cine en una experiencia completa y divertida.
Paso 1: Elige la Película Musical Perfecta
Primero, selecciona una película musical que sea entretenida, educativa y apropiada para la edad de los niños. Aquí tienes algunas opciones:
El Rey León (1994) – Para aprender sobre el ciclo de la vida y la responsabilidad.
Frozen (2013) – Ideal para hablar sobre la autoaceptación y el amor familiar.
Coco (2017) – Para explorar la cultura, la importancia de la familia y la música.
La Sirenita (1989) – Fomenta el valor de la perseverancia y el deseo de descubrir el mundo.
Mary Poppins (1964) – Perfecta para desarrollar la imaginación y el valor de la diversión.
Encanto (2021) – Para celebrar la individualidad y la importancia de la familia.
Escoge una película que se ajuste a los intereses de los niños y al mensaje que te gustaría reforzar.
Paso 2: Crea el Ambiente de Cine en Casa o en el Aula
Antes de la película, prepara un ambiente cómodo y acogedor.
Entradas de cine DIY: Si quieres añadir un toque especial, haz entradas de cine que los niños puedan "comprar" antes de la película.
Este simple detalle hará que los niños sientan que es una experiencia especial y emocionante.
Paso 3: ¡Hora de la Película!
Reproduce la película seleccionada y, mientras la ven, anímales a prestar atención a las canciones, los personajes y las situaciones importantes. Anímales a cantar o bailar durante la película.
Paso 4: Actividades Musicales Post-Película
Aquí viene la parte más interesante: después de la película, extiende la diversión con estas actividades inspiradas en la música y los temas de la película.
1. Karaoke de las Canciones de la Película
Después de ver la película, organiza una sesión de karaoke donde los niños puedan cantar las canciones que más les gustaron. Puedes encontrar versiones instrumentales de las canciones en plataformas como YouTube.
Instrucciones:
Elige las canciones más populares de la película (como “Hakuna Matata” de El Rey León o “Let It Go” de Frozen).
Canta en solitario o en grupo.
Fomenta que los niños imiten a los personajes y añadan gestos o movimientos a la interpretación.
Beneficios: Esta actividad ayuda a desarrollar la memoria, la coordinación vocal y la confianza en sí mismos al cantar delante de otros.
2. Dibujos Inspirados en la Música
Una vez que la película ha terminado, invita a los niños a dibujar escenas de la película o personajes que más les hayan gustado mientras escuchan las canciones de la película de fondo. Esto combina la creatividad visual con la experiencia auditiva.
Instrucciones:
Proporciónales hojas de papel y lápices de colores o acuarelas.
Reproduce las canciones de la banda sonora mientras ellos dibujan.
Pide que dibujen la escena musical que más les gustó o cómo se sintieron al escuchar una canción en particular.
Beneficios: Esta actividad refuerza la capacidad de concentración y fomenta la creatividad, permitiendo que los niños expresen lo que han experimentado de manera visual.
3. Juega a "Adivina la Canción"
Este es un juego divertido que hará que los niños pongan a prueba su memoria musical.
Instrucciones:
Pon fragmentos de canciones de la película y haz que los niños adivinen de qué parte de la película es o quién la canta.
Puedes también reproducir versiones instrumentales para hacer el juego más desafiante.
Beneficios: Esta actividad refuerza la memoria auditiva y la comprensión musical. Además, es muy divertido para jugar en grupo y celebrar la música de la película.
4. Escenificaciones Musicales
Si los niños disfrutan actuando, ¡esta actividad es perfecta! Después de la película, puedes recrear las escenas musicales con pequeñas representaciones teatrales.
Instrucciones:
Divide a los niños en grupos pequeños y asígnales una escena o canción de la película.
Déjalos crear sus propios disfraces y escenarios usando materiales simples como mantas, cartones o incluso disfraces que ya tengan.
Cada grupo debe representar su escena, cantando o bailando al ritmo de la canción.
Beneficios: Fomenta la creatividad, la expresión emocional y el trabajo en equipo, además de ser una forma muy divertida de revivir la película.
5. Hablar sobre los Valores de la Película
Una vez terminadas las actividades, dedica un momento para hablar con los niños sobre los mensajes y valores que han aprendido en la película. Pregunta qué escenas les gustaron más o cómo se sintieron con las canciones.
Preguntas para la reflexión:
¿Qué aprendiste sobre la amistad o la familia en la película?
¿Qué canción te hizo sentir más feliz o emocionado?
¿Qué personaje te gustó más y por qué?
¿Cómo te hace sentir la música cuando ves una película?
Beneficios: Esta conversación ayudará a los niños a reflexionar sobre los valores y lecciones importantes de la película, además de fomentar su capacidad para expresar sentimientos y pensamientos.
Convertir una simple sesión de cine en una actividad interactiva y educativa es una manera fantástica de que los niños no solo disfruten de una película musical, sino que también aprendan y exploren su creatividad. Estas actividades les permiten cantar, bailar, dibujar y pensar sobre lo que han visto y escuchado, haciendo que la música sea una parte activa y enriquecedora de sus vidas.